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EL RADIOAFICIONADO PATITIESO

LA ANTENA MUTANTE

LA ANTENA MUTANTE

CONTEXTUALIZANDO 

Este trabajo fue publicado en la revista CQ Radio Amateur en mayo de 1988, y fue el resultado de la necesidad de disponer de una antena que trabajara bien en las bandas de 10, 15 y 20 metros y que, además y sobre todo, fuera muy barata. Todo el dinero disponible para el experimento se invirtió en la compra de un buen libro sobre antenas.  

El artículo está orientado especialmente a los radioaficionados procedentes de la Banda Ciudadana que quieran reconvertir sus antenas de 27 MHz., en vez de comprar un elemento comercial, mucho más caro y, probablemente, menos eficaz.  

Aunque se habla de una antena de media onda de CB, lo mismo puede hacerse con las típicas antenas de 5/8 de onda.   

LA ANTENA MUTANTE

 “Érase una vez una vieja y rota antena que triste y olvidada dormía el sueño de los justos arrinconada en un tejado. Yacían sus hierros sucios de polución anhelando sentir de nuevo el cosquilleo de la radiofrecuencia recorriendo su metálico cuerpo. Pero un día ...” 

Así podría empezar la historia de nuestra protagonista, una antigua antena Zommas-car de media longitud de onda para la banda de 27 Mhz que rescatamos del olvido para reconvertirla en una efectiva antena tribanda de HF para 10, 15 y 20 metros, muy adecuada para el DX y de gran rendimiento al carecer de trampas. 

Originalmente, la antena media 5,25 metros y como plano de tierra tenía tres pequeños radiales curvos de unos 57 centímetros. Para adaptar impedancias, existía en su base una pequeña bobina convenientemente protegida por un capuchón aislante de color negro. Al iniciar su readaptación recordaremos unos conocimientos básicos. Mediante la fórmula:  

142,5 / Mhz = ½ longitud de onda en metros 

vemos en la práctica que: 

142’5 / 14,150 Mhz. = 10,07 metros (½  onda) 

pero como sólo nos interesa la medida de ¼ de onda, debemos dividir este resultado por 2, y obtendremos: 

10,07 metros / 2 = 5’03 metros (¼ onda) 

por lo que enseguida nos damos cuenta de que cortando unos centímetros el radiante vertical, añadiendo después tres radiales de la misma longitud que este y, por supuesto, eliminando la pequeña bobina de la base, ya tenemos una vertical de ¼ de onda para la banda de 20 metros. 

Pero no adelantemos acontecimientos y vayamos al paso. En primer lugar mediremos cuidadosamente el mástil radiante desde la misma base, allí donde está la rosca del conector PL en el cual se enchufa el cable coaxial, hasta la medida citada de 5,03 metros. Allí, con ayuda de una sierra de cortar hierro, aserraremos el trozo sobrante al cual le quitaremos el capuchón que tiene en la punta y lo trasladaremos a la nueva extremidad. 

A continuación procederemos a sacar los radiales de aluminio que ya no nos son de ninguna utilidad y los guardaremos para futuros experimentos, (en realidad se trata de no tirar nada y tener en casa la mayor cantidad posible de cacharros.) 

Ahora se trata de eliminar la bobina. Para ello aserraremos verticalmente su alojamiento. Cuando aparezca, con la ayuda de unas tenacillas de punta larga, cortaremos sus extremos y la sacaremos al exterior. Posiblemente tendremos que romperla, no importa. Ahora deberemos efectuar una nueva conexión para establecer de nuevo la continuidad eléctrica entre la rosca del PL y el radiante, para ello nos proveeremos de un hilo de cobre semirígido de un diámetro entre 1,5 y 2,5 mm y de la conveniente longitud para que alcance ambos extremos. 

Ya que tenemos el soldador caliente, aprovecharemos para soldar un trozo de hilo de cobre de las mismas características que el anterior y de una longitud aproximada de 30 cm. formando una cruz con el primero según se observa en el dibujo. Una vez asegurada una correcta soldadura taparemos el alojamiento convenientemente de manera que no pueda entrar el agua ni la humedad. De nuevo volvemos a la fórmula milagrosa para hallar la longitud de onda correspondiente a los radiantes de las otras dos anternas, así tenemos que: 

142,5 / 21,200 Mhz. = 6,72 metros

½ onda6,72 metros  / 2 = 3,36 metros

 ¼ de onda 142,5 / 29 Mhz. = 4,91 metros

 ½ onda4,91 metros / 2 = 2,45 metros ¼ onda 

Nos proveeremos ahora de una buena longitud de cable eléctrico, tanta como 45 metros, pues de él deben salir los radiantes verticales para formar las antenas de 10 y 15 metros respectivamente, y tres radiales por banda de la misma longitud que la parte vertical de cada antena, es decir: 

- 3 trozos de 5,03 metros para radiales antena de 14 mhz.

- 3 trozos de 3,36 metros para radiales antena de 21 mhz.

- 3 trozos de 2,45 metros para radiales antena de 29 mhz. 

Otros elementos necesarios para proseguir la construcción serán: 

- 4 pedazos de madera o plástico de 25x4x1 centímetros

- 4 abrazaderas del tamaño apropiado de la forma “omega” (según dibujo)

- 9 grapas de plástico y clavo de acero o tornillo

- 3 terminales eléctricos de cabezal redondo para los radiales

- tornillería y herramientas varias. 

Los radiales, una vez cortados a medida, se unirán por familias, es decir, formando haces cada uno de los cuales constará de un hilo para 10 metros, uno para 15 metros y otro para 20 metros. Pelaremos un sólo extremo de cada alambre y uniremos los tres retorciéndolos por esta punta e introduciéndolos a continuación por el terminal eléctrico. Luego con la ayuda de unos alicates o mejor un tornillo de mesa aplastaremos fuertemente la embocadura del terminal. Un tornillo y una arandela nos ayudarán a fijar el nuevo haz de radiales en el sitio que antes ocupaba cada uno de los radiales curvos de aluminio. 

Tal vez para abreviar sería conveniente observar detenidamente el dibujo, pues en este caso una imagen vale más que mil palabras. 

El diseño de esta antena no es nuevo, en realidad se trata del viejo sistema de dipolos múltiples alimentados por un sólo cable coaxial, los conocidos “bigotes de gato”, puestos en posición vertical. Su funcionamiento también tiene una explicación relativamente sencilla; cuando un transmisor se pone en funcionamiento en una determinada banda, los otros dos radiantes presentan una impedancia tan elevada que la corriente radioeléctrica sólo puede discurrir cómodamente a través de la antena cuya medida se corresponde con la frecuencia de emisión. 

AJUSTES 

El ajuste de la tribanda es sencillo pues basta cortar o alargar las partes verticales y sus respectivos radiales hasta conseguir una ROE mínima. Pero, ¿no habíamos hallado las medidas exactas para cada frecuencia mediante la socorrida fórmula? Cierto, pero si todo fuera tan sencillo, ¿dónde estaría la experimentación? 

Al estar interrelacionados los tres elementos radiantes, su ajuste dependerá de la distancia entre ellos, de la situación en cada caso particular, de la inclinación de los radiales, etc. 

En línea generales, comentaremos que en nuestros ensayos el elemento para 20 metros no varió prácticamente de longitud, el de 15 metros fue acortado en unos tres centímetros y el de 10 metros tuvo que ser reducido considerablemente, sobre unos 12 centímetros. Naturalmente sus radiales respectivos corrieron igual suerte. 

Para saber si es necesario alargar o acortar cada antena deben hacerse varias lecturas de con el instrumento medidor de ROE, una al principio, otra al final y, al menos, una en mitad de banda. Si observamos que al aumentar la frecuencia baja la ROE, significa que la antena es corta. Y viceversa, si al bajar la frecuencia baja la ROE, la antena es larga. 

La construcción de esta antena es muy fácil, pues en un par o tres de horas puede realizarse toda la operación, y el costo de la operación es irrisorio comparado con las antenas comerciales, pero la razón más importante para realizar este experimento es que mientras lo hacemos estamos ejerciendo de radioaficionados. Ahí es nada! 

 

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